Noviembre es un buen mes para la práctica deportiva, ya que ayuda a quemar las calorías extras que aún quedan del verano, fortalece el sistema inmunológico y múltiples beneficios más. La práctica deportiva siempre adaptada a cada persona, con buena técnica y siempre acompañada de la alimentación correcta.
Tanto si se practica deporte por salud, aunque no guste, como si se practica porque gusta y se disfruta, éste debe de ir siempre acompañado de una alimentación correcta, adaptada a la persona, tipo de práctica deportiva y objetivo.
La alimentación correcta va a evitar lesiones, mejorar rendimiento deportivo y obtener mejores marcas.
Cabe tener en cuenta que las necesidades nutricionales de una persona que practica deporte son muy diferentes a las de una persona sedentaria o con baja actividad física.
Perfilando más cabe destacar que estas necesidades nutricionales varían mucho según el tipo de deporte, duración, intensidad del entrenamiento, edad, sexo, estado fisiológico del deportista, estilo de vida diario, clima, etc. Por lo tanto, toda esta información es muy relevante para calcular las necesidades nutricionales y calóricas de cada deportista, así como el tipo de alimento más adecuado de donde extraer dichos nutrientes.
El deportista debe de ser consciente de la necesidad de cumplir con su dieta, pues este aporte de nutrientes tiene un alto impacto en sus resultados, tanto en entrenamientos como competiciones.
Cada deportista es diferente y no existe una dieta universal para todos los futbolistas o atletas o ciclistas o culturistas entre otras prácticas deportivas, así como no hay una única dieta que satisfaga las necesidades del mismo deportista en las diferentes etapas de la práctica deportiva.
La clave está en aportar al organismo los nutrientes y calorías necesarias para mantenerse saludable, rendir al máximo y evitar lesiones. Con demasiadas calorías se puede acumular grasa, algo que no interesa, pero con pocas puede bajar rendimiento y no alcanzar los objetivos. Los nutrientes pese a que pueden obtenerse de diferentes fuentes, deben de escogerse aquellas que mejor se adaptan al sistema digestivo de cada persona, a cada práctica deportiva y momento.
El momento y número de ingestas, así como llevar una dieta rica y variada, es fundamental.
Cabe destacar en la práctica deportiva, que en ningún caso los suplementos nutricionales, así como productos varios que imitan alimentos, deben de sustituir a los alimentos verdaderos. Como la propia palabra indica, son complementarios, no sustitutorios.
Si quieres saber qué tipo de alimentación y cuidados necesitas de acuerdo a tu práctica deportiva y estado personal, no dudes en solicitar tu visita.
